Somos una empresa hispano-israelí con plantas de fertilizantes líquidos elaborados según las necesidades de cada cliente, y que llegan a los campos en no más de 48 horas.
Las empresas agrícolas de La Libertad se caracterizan por su apuesta en la alta tecnología, desde la genética, maquinaria, infraestructura de riego y otros. Por eso, nuestra planta de producción de fertilizantes líquidos ofrece un producto innovador, con fórmulas a la medida del cliente, que cubren las necesidades nutricionales de cada campo y cultivo.
“Las empresas agrícolas están muy bien consolidadas en Trujillo, en especial, en el gran proyecto de irrigación Chavimochic. Además, en un par de años más estará la licitación de terrenos de la Tercera Etapa del proyecto, que incrementará el área agrícola. Por ello, el modelo de negocio de GAT encaja muy bien en la zona”, comenta Julio Zavala, Gerente General de la firma.
Como parte de nuestra presencia en la región, a mediados del 2018, compramos un terreno de 30,000 m² en la zona de Salaverry, donde iniciamos la construcción de la planta de producción en enero de 2019. Esta moderna infraestructura cuenta con un proceso 100% automatizado y una capacidad productiva de 60,000 t/año. También cuenta con un gran nivel de almacenamiento en 27 tanques. Nos ubicamos en la zona de Salaverry porque tendremos la ventaja de estar cerca al terminal portuario, que es donde arribará la materia prima para la elaboración de nuestros fertilizantes líquidos.
Adicionalmente, para el traslado del producto, contamos con 6 camiones cisternas, cada uno con una capacidad de 22 toneladas, aproximadamente. La planta está destinada para satisfacer la demanda de los clientes de Trujillo, pero también a los de Lambayeque y Áncash.
Los camiones son monitoreados a través de un sistema de monitoreo (GPS) durante su recorrido. De esta manera, se podrá avisar al cliente vía WhatsApp o mensaje de texto la hora en la que le estará llegando el pedido al campo.
ENTREGA INMEDIATA
Desde agosto, ofrecemos este producto único en el mercado. Sobre la base de una solución madre, fabricamos las fórmulas a la medida del cliente, que posteriormente son cargadas en los camiones. Estos son sellados con un precinto y tienen un código único. “Este número nos permite tener la trazabilidad del producto desde que se produce hasta que llega a campo”, sostiene Zavala. Ya en el lugar de entrega, este se deposita en los tanques de 2,500, 5,000 o 10,000 litros que hoy manejan las agroindustrias. La distribución del producto es rápida, en un plazo entre 24 y 48 horas, un tiempo de respuesta similar al que manejan empresas en España, donde este tipo de productos está mucho más desarrollado que en América Latina.
“El proceso productivo comienza con la recepción de la materia prima (fertilizantes sólidos). Una vez que se deja la materia prima en los reactores, todo el proceso es automatizado. Nada es tocado por la mano del hombre. Esto nos permite flexibilidad a la hora de cambiar la fórmula de un día para otro. Así, un operario hace la validación de la fórmula en laboratorio y se inicia la producción. Cada cliente es único. Durante todo el proceso productivo se tienen controles de calidad”, explica Zavala.
UN MODERNO LABORATORIO MONITOREA TODO EL PROCESO
Un punto clave en todo este proceso es que contamos con un laboratorio en la propia planta, que monitorea todo el proceso. Como parte del protocolo de calidad, tomamos una muestra del fertilizante líquido para validar el producto antes de su entrega. “Una vez que el producto se despacha en los tanques del cliente, también se toman dos muestras. Uno de ellas se entrega al cliente para que tenga una contramuestra del producto y el otro frasco se lleva a nuestro laboratorio. Esta muestra se mantiene con nosotros durante seis meses, para cualquier prueba que se requiera”, expone. Seguidamente, los camiones vuelven a la planta para un lavado inmediato, con el fin de evitar cualquier contaminación en el siguiente pedido.
Para acompañar el proceso, contamos con un equipo técnico-comercial, encabezado por dos ingenieros agrónomos que tienen experiencia en campo. Estos profesionales son los que recogen la necesidad de nutrición que tiene el cultivo, para posteriormente, plasmarlo en una propuesta de fertilizante líquido. Cada una de las fórmulas se maneja con total confidencialidad. En España, GAT maneja más de 60,000 formulaciones. Según el número de campos, cultivos y variedades; cada empresa puede manejar un centenar de fórmulas que serán atendidas por la firma.
MÚLTIPLES VENTAJAS
Nuestros productos y servicios representan múltiples e importantes ventajas:
- Mayor precisión: Elaborado en laboratorio propio, conseguimos exactitud en la composición nutritiva, asegurando su máxima eficacia.
- Tecnología avanzada: El proceso de fabricación está totalmente automatizado e informatizado, permitiendo flexibilidad para elaborar una amplia gama de fórmulas.
- No necesita disolución: Preparado para su uso directamente, en cualquier tipo de cultivo, cualquier tipo de suelo y para cualquier tipo de sistema de riego.
- Ahorro en energía y tiempo: Minimiza la manipulación, no es necesario transportar ni cargar sacos y bidones.
- No necesita almacenamiento: Evitando posibles pérdidas o desajustes en almacén.
- Rapidez en la entrega: El producto es entregado en el fundo en menos de 48 horas.
- Asesoramiento durante todas las fases del cultivo: Seguimiento por nuestros profesionales agrónomos para asegurar la evolución y eficacia del plan de fertilización.
- Mayor limpieza en el sistema de riego: La pureza del fertilizante líquido ayuda a evitar impurezas en el sistema de riego, aportando mayor durabilidad y menor costo de mantenimiento.
- Ayudamos al medio ambiente con menor contaminación por residuos: Al no tener envase y embalaje, las empresas agroindustriales no tienen que incluir en su ciclo productivo estos residuos.
Fuente: Adaptación Revista Red Agrícola – Septiembre 2019
